¿Pudiste verla? Cierra los ojos y dame tu mano.
Siénteme golpear mis caderas, gimiendo, adelantándome a la armonía descuidada de la arena que danza bajo sus pezuñas. El viento quebranta mi cuerpo difuminando la silueta de una hembra que galopa desnuda.
Llevo sus crines azuladas anudadas a mis manos, arisca y desbocada, llevo mi sexo rezumando sobre su lomo, su costado. Galopa arrebatador el deseo, teñido de estrellas, dejando un surco perfumado bajo las olas de un cielo agotado.
Galopa hasta ti, siempre juntas,
porque esta noche,
la aulladora de sueños…
Shhhh… te guarda... estuvo a tu lado.
Tuya
Siénteme golpear mis caderas, gimiendo, adelantándome a la armonía descuidada de la arena que danza bajo sus pezuñas. El viento quebranta mi cuerpo difuminando la silueta de una hembra que galopa desnuda.
Llevo sus crines azuladas anudadas a mis manos, arisca y desbocada, llevo mi sexo rezumando sobre su lomo, su costado. Galopa arrebatador el deseo, teñido de estrellas, dejando un surco perfumado bajo las olas de un cielo agotado.
Galopa hasta ti, siempre juntas,
porque esta noche,
la aulladora de sueños…
Shhhh… te guarda... estuvo a tu lado.
Tuya
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